Rituales fríos que alejan el mal Sepa de qué se tratan este tipo de hechizos y cómo anular para siempre a la tristeza o a sus enemigos a través del congelamiento.La magia fría parte del fundamento de que congela y detiene para siempre lo que no deseamos, daños y maleficios. Así, al igual que el agua se congela con el frío, las penas del corazón y las maldades ajenas se detendrán o neutralizarán a fin de evitar que bloqueen el avance de la felicidad.
¿QUÉ NECESITA PARA PRACTICARLA?
En la actualidad, esta magia es fácil de realizar porque se practica ayudándonos de: un freezer, congelador o heladera; con recipientes de telgopor que mantienen el frío por horas; o usando hielo seco. Es por eso que su uso se ha incrementado tanto.
DOS RITUALES HELADOS
A continuación, le proponemos dos rituales, uno para congelar asuntos negativos internos y, otro para detener influencias malignas externas.
1. Congele todas sus penas:
En una cartulina de un color de su elección, escriba el motivo de su angustia y, luego, con una tijera corte la cartulina en pequeños trozos. Deposite un puñado de hongos secos en un pequeño recipiente de metal y arroje encima los pedacitos de cartulina.
Mientras, diga: “Así como esta cartulina en la que estaban escritas las pruebas de mi mala suerte se ha deshecho en fragmentos, así deseo que se deshagan mis penas”.
Introduzca el recipiente en el congelador para que el frío haga su efecto pulverizador y aleje la adversidad de su vida. Entonces, diga: “Qué el frío paralizante aleje este dolor de mi corazón”.
Recuerde: el recipiente deberá permanecer en el congelador desde el primer día de la fase lunar menguante, hasta el comienzo de la luna creciente.
Pasado este período, tire todo a la basura.
2. Ataque frío contra enemigos:
La manera más sencilla de congelar a un enemigo o a sus actos de envidia y maldad es sustraerle algún pequeño objeto de su pertenencia. Por ejemplo, un simple cabello o una fotografía. Si le es imposible, puede escribir el nombre en un papel.
Una vez que tiene el objeto, colóquelo en el congelador dentro de una bolsa negra cerrada con una cinta roja. Luego de un mes, retire la bolsa del congelador y arrójela en una encrucijada de dos calles.
